
Buceo Apnea
Floto con toda tranquilidad, respiro por la boca mientras veo el fondo. Uno que otro pez circula cerca de la arena, me relajo, cierro mis ojos, hago un conteo interior y tomo aire, hasta el último trozo de aire, cierro mi boca y comienzo a bajar. Aleteo fuerte, me ayudo con mis manos y poco a poco el fondo se acerca cada vez más a mí; algunos peces nadan lejos, pero pocos segundos después vuelven curiosos a averiguar de qué se trata, quien es el visitante que cayó del cielo